Por los cordales de Cangas

Espectacular, atrevida y bellísima ruta la que Ángel y Jorge  nos propusieron hoy en esa enciclopedia para la BTT que es Cangas del Narcea.

Ruta circular en Cangas: Limés – Perdiecho – Santarbás – Limés. (16/3/2014)

Longitud: 30 km  /  Tiempo: 4 horas (con paradas)  /  Desnivel positivo acumulado: 986 m.

Ruter@s: Rosa, Puri, Lorena (Grado), Noelia, Manuela, Luz, Mariajo, Ángel, Jorge, Javi, Juan, Juaco, Sabino, Salva y Félix.

En el puente sobre el río Narcea
En el puente sobre el río Narcea

                Salimos del Hotel La Casilla a las 10 de la mañana con el sol luciendo alegre, con no demasiadas horas de sueño y con las piernas amagando agujetas tras la exhibición de bailes regionales de la noche anterior en El Chicote al son de la afinada gaita de El Praviano. Apenas unos kilómetros suaves en dirección a Cangas para repartir el aceite por la cadena y nada más cruzar el Narcea empezamos a rampear.

Lorena sufriendo... y triunfando
Lorena sufriendo… y triunfando

Terribles porcentajes sobre asfalto (casi del 30%) nos llevan de Santa Eulalia a Llano y luego a Penlés, donde tomamos una pista de grandes piedras y muy técnica camino de Perdiecho. Sarmentosos bosques de castaños viejos nos dan una sombra que solo valoraremos unos kilómetros después, cuando una polvorienta y pedregosa rampa interminable y de fuerte pendiente nos deje, pasando por la capilla de Berdondio, en Santarbás.

Máquina total
Máquina total

Hemos ganado tanta altura que disfrutamos de hermosas vistas de la perfecta pirámide del Pico Caniechas, del Cueto de Arbás o del Pico del Fraile, todos ellos con una generosa capa de nieve que contrasta con el cielo azul y el tremendo calor que por momentos nos agobia.

Gran, gran, estilo
Gran, gran, estilo

Interminables kilómetros de subida casi continua terminan por asomarnos al fin a los collados de Trones, donde las pendientes suavizan y se suceden toboganes rápidos, antesala de la última rampa dura del día que debe subirnos hasta un promontorio coronado con antenas, cota máxima de la jornada. En sus faldas sale a recibirnos un rebaño de vacas de la renombrada raza Asturiana de los Valles, no en vano estamos en la considerada mejor aldea ganadera de Asturias.

La alegría de... bajar
La alegría de… bajar

Toca, por fin, bajar. Alegría en el pelotón y trabajo extra para las pastillas; ¡que se lo curren! que hasta ahora no han dado un palo al agua. Una primera gravera ancha pero peligrosa por la velocidad y el tamaño de las piedras da paso a un sendero entre pinos y castaños con el firme más fiable aunque con zanjas de desagüe pronunciadas que nos hacen mantenernos alertas.

Bonita trazada de Noelia
Bonita trazada de Noelia

De pronto divisamos Cangas, llevamos una eternidad bajando pero aún estamos colgados sobre la capital suroccidental. Pasamos por Santa Marina, sorteamos unos cuantos requiebros más y escuchamos, aliviados, cansados, satisfechos y hambrientos, el acogedor run-run del Narcea.

El equipo Superfly, como bien se ve, chupando rueda
El equipo Superfly, como bien se ve, chupando rueda

Paseo triunfal hasta Limés, unos mimos a nuestras monturas que tan alto nos llevaron hoy… y al plato. Grande Cangas; grandes Ángel y Jorge.