Distancia: ± 15,5 Km
Tiempos: 8 h
Desnivel: + 1.150 m
Ruteras: Rosa, Paloma, Jorge, Charo, Begoña, Fermín, Mariajo, Ana, Samu, Emma, Marta, Carmen, Manolo, M.ª José y Marta.
Acceso: Desde Oviedo -Autovía A-8 Santander-Lieres-Cangas de Onís-Covadonga-Lagos de Covadonga-Pandecarmen.
Itinerario: Pandecarmen (942 m) – Camín de la Madera – Llanos del Burdio-Monte de los Cerezales-Vega los Corrales-Pasu el Escaleru (1.069 m)-Jaedo de Ciarda-Cdo. de Cabritales (1.095 m)- Astas de Ciarda-Vega Ciarda – Alto de Los Gurbiñales (1.497 m) – Majada de Junjumia (1.411 m) – Vega el Paré (1.420 m)-Senga Vegarredonda-Vega de Justillagar-Vega de la Vallisca-Valle de Redimuña-Canal de la Mostaya-Güeyus de la Teya-Vega el Espino- Puente Redimuña-Pandecarmen
Salida montañera por una de las zonas más recónditas del Macizo a pesar de estar próxima a los Lagos y que probablemente será restringida con el nuevo plan de gestión de Picos.
Recorrimos la Sierra de Gurbiñales, cordal situado a la derecha del camino de ascenso al refugio de Vegarredonda, delimitado por los ríos Pomperi, Junjumia y Pelabarda, partiendo de Pandecarmen por el precioso «Camín de la Madera» (construido entre los años 1957 y 1958 del siglo pasado para explotar la madera del Jaedo de Ciarda, sacándola en tablones transportados por caballerías).
Concretamente en un pequeño cantu, conocido como El Jortigalón se puede observar el profundo tajo por el que discurre el río Pomperi, además de ver enfrente la inmensa masa forestal del Bosque de Pome y su recorrido.
Posteriormente y después de atravesar el majestuoso Jaedo de Ciarda, alcanzamos el collao de Cabritales, con unas estupendas vistas sobre la mecedura de los ríos Pelabarda y Junjumia justo antes de verter sus aguas al Dobra, además de la Sierra de Amieva, Piedras Negras y los rebecos que nos observaban atentamente.
Continuamos nuestro recorrido ascendiendo hasta la abandonada vega de Ciarda para poco después y con una pequeña trepada elevarnos al Alto de los Gurbiñales, nuestra cumbre de hoy con unas vistas sobre las principales cumbres del Macizo Occidental que a más de una dejaron boquiabierta, destacando las Torres de Cebolleda y Torre de Stª Mª de Enol y a su derecha la Torrezuela, el Requexón, Los Poyones, la Canal Vaquera, el Cotalba y el Mirador de Ordiales.
También veíamos gran parte del valle del Junjumia, que íbamos a recorrer y al fondo el Refugio de Vegarredonda.
Un poco de cresteo muy juguetón por la sierra y pequeños destrepes, para descender vertiginosamente por la canal de la Ingesta las Fuentes hacia el Junjumia, para hacer parada de avituallamiento.
Después de una comida muy amena, incluso algún que otro remojón en el río, nos fuimos hacia los Güeyos del Junjumia, lugar de nacimiento de este mítico torrente, para luego ascender a través de la Vega de Junjumia, a la Vega el Paré, donde el grupo se dividió pues había gente que ya iba cansada, descendiendo por la ruta clásica de subida al refugio de Vegarredonda, puerta de entrada a las altas cumbres.
El resto nos lanzamos hacia la bonita vega de Justillagar a los pies del Cantu Limpó, para realizar el resto del recorrido, cambiando al valle de Redimuña por zona de pradería, para descender por la Canal de la Mostaya, ya por terreno calizo y con bastante vegetación, donde vimos unos ejemplares de grandes Hayas (Las Jayonas), protegidas por unos cierres y así estudiar su evolución, enlazando poco después con el camino de Vegarredonda, en las proximidades del Puente Redimuña, donde aprovechamos para refrescarnos en una poza de agua cristalina e incluso algunas valientes, pegarse un chapuzón, para regresar de nuevo a Pandecarmen.
Impresionante el día, la ruta, la compañía y sobre todo nuestra guía, que diseñó un camino espectacular, que nos permitió observar un paisaje que emociona por su belleza, por sus contrastes y por su situación en un entorno de ensueño.