El viernes 20 Una a Una celebró su cena navideña. Risas, gaitas, sorteos y el buen rollo de siempre entre la treintena larga de participantes que nos juntamos en La Pumarada de Oviedo. Este año fueron invitados especiales del Club Osvaldo y Víctor. Y el domingo 22 vuelta a las caleyas a quemar lo comido y sudar lo bebido.
Ruta circular en el concejo de Oviedo: Oviedo – alto del Naranco – Oviedo. (22-12-2013).
Longitud: 25 km.
Tiempo: 3 horas.
Desnivel positivo acumulado: 653 m
Cota máxima: 611 m (en la cresta occidental del Naranco)
Cota mínima: 245 m (en Oviedo).
Ruter@s: Rosa, Puri, Manuela, Almudena, Conchi, Juan, Juaco, Javi y Félix.
Quedamos a las 10 de la mañana en Trek Morán con cielo muy incierto y frío. Quién más, quien menos, espera regresar de la ruta siendo millonario. La idea era rodar por el camino viejo de Covadonga pero ante las nubes amenazantes decidimos no alejarnos mucho de Oviedo pensando en una posible retirada rápida.
Salimos por el parque de Purificación Tomás cruzando el arroyo Claudio por senderos que nos acercan a San Lázaro de Paniceres. Enseguida chocamos contra las primeras rampas duras del día que nos llevan a Ules.
Tomamos camino a La Contriz. Muy duro, rampas extremas y húmedas que nos llevan al Canto del Borbotón. El cuentakilómetros no corre, plato pequeño, piñón máximo y vamos llegando a las antenas occidentales del Naranco con Puri y Juaco destacados tras atacarnos a los demás y dejarnos clavados. Reagrupamiento, fotos, agua y un vistazo al cielo para comprobar que va despejando y promete quedarse una bonita mañana invernal.
Afrontamos una bajada estrecha pero cómoda al principio que se complica técnicamente luego al aparecer mucha piedra resbaladiza. Salimos a las pistas de la transnaranconiana y nos topamos con una numerosísima excursión cuyos integrantes nos miran como quien contempla locos en el psiquiátrico. Los más avispados reconocen a Rosa y las miradas se tornan de respeto. Respiramos un par de bocanadas de ese aroma de grandeza que va dejando nuestra líder a su paso y aquello nos da fuerzas para los dos últimos empellones de la transnaranconiana.
Bajamos la cara norte del Naranco por el sendero que nace en el monolito y que nos lleva hasta el Nora. Durante unos kilómetros peleamos con el barro y bajamos a enganchar el Camino de Santiago que abandonamos en Las Campas para retornar a Oviedo por La Florida.
Hermosa ruta la de hoy, corta pero exigente, una verdadera etapa sudaturrones con continuos toboganes de fuertes pendientes tanto subiendo como bajando.
Tarjeta amarilla para Paula que nos abandonó por una vulgar pandilla de “carreteros”. (Un abrazo para esos buenas ciclistas de Grado y buenos amigos de Una a Una).