En la villa de Jovellanos (y de Quini); y Paula subcampeona de Asturias

Este domingo Manuela volvió a demostrar talento y buen gusto preparando para el club una hermosa ruta con sabor a ciclismo bueno y buscándole las costuras y fronteras al concejo de Gijón.

Rodando bajo la lluvia
Rodando bajo la lluvia

Ruta circular en Gijón y Siero: Gijón – bosque de Muñó – Gijón, (6/7/2014).

Longitud: 47 km  /  Tiempo: 4 horas /  Desnivel positivo acumulado: 916 m.

Ruter@s: Manuela, Ingrid, Marina, Felipe, Juan y Joaquín.

Marina primera, Ingrid tercera y Felipe II
Marina primera, Ingrid tercera y Felipe II

 

Son la 9:30 y en la escalera 14 de la Playa de San Lorenzo tan sólo está  Manuela mirando su móvil. No para de llover y, bajo una pérgola, ya estaba pensando en volverse a casa cuando aparece a lo lejos Marina. Un poco más tarde Ingrid les grita desde el coche: “esperadme, que voy a aparcar”. Estupendo chicas, ya hay ruta para hoy.

A las órdenes de Manuela  nos dirigimos a La Camocha por la senda fluvial del río Piles. Al llegar al poblado minero subimos por Santa Cecilia y tras unas pendientes de asfalto muy duras seguimos por  la pista oeste del Picu El Sol hasta la Collada del Monte. Continúa lloviendo y decidimos no hacer la última rampa de hormigón hasta la cumbre, sino continuar a La Barrera y Les Cabañes.

Marina e Ingrid contra los elementos
Marina e Ingrid contra los elementos

Pasado El Xigal comienza a abrirse la niebla y desde la collada ya vemos el cordal de Deva y el Picu Fario. Un poco más allá, desde El Monte, divisamos Oviedo y el Naranco. La zona, antes de llegar al bosque de Muñó, es salvaje y el terreno con barro se hace resbaladizo como bien pudo comprobar Marina.

Comienza ahora la parte más divertida de la ruta con una rápida y larga bajada a través de un bosque de coníferas. La pista es ancha pero hay que tener cuidado con los badenes. Vamos bordeando el Pico San Martín y tras pasar el arroyo del Cogollo del monte llegamos a Rioseco.  De nuevo toca subir por asfalto a Valdepumares. Allí enlazamos con la carretera AS-246 un poco más arriba de La Calabaza en sentido a Gijón.  Pasamos Grandarrasa y llagamos al alto de la Madera.

Manuela y Marina: el equipo M.
Manuela y Marina: el equipo M.

Ahora toca una cómoda bajada por carretera hasta Mareo. Pero, como lo nuestro es la BTT, nos desviamos a la derecha  por pista.  Luego, por hormigón, pasamos bajo la autovía minera. Seguimos por una fortísima bajada hasta el arrollo del Llantero. El hormigón está mojado. Oímos derrapar y a continuación Ingrid sale volando, afortunadamente  sin  consecuencias.

Ya en Leorio alcanzamos la vía verde de La Camocha y salimos a la altura de la mina. Después, por el arroyo de Llantones regresamos a Gijón.

Otra estupenda etapa gijonesa para las Una a Una de la mano de Manuela; y es que en estos tiempos en los que no se puede contar ya ni con “la Roja”, la que nunca nos falla es nuestra “peliRoja”. Damos la bienvenida a Ingrid, a la que no acompañó el tiempo en su debut pero que demostró grandes maneras, coraje y buen humor.

Por otra parte ayer se celebró en Cangas de Onís el Campeonato de Asturias de BTT con grandes noticias para Una a Una: Paula es desde hoy la nueva subcampeona de Asturias en categoría élite. Melena de oro, medalla de plata, piernas de acero, Paula solo fue superada por nuestra madrina Rocío Gamonal (Centeno C2C), leyenda y orgullo del deporte asturiano.

Enhorabuena a ambas; con bicicleta o sin ella sois ejemplares.

Subida a los Cadavales

Los concejos de Tineo y Cangas del Narcea fueron hoy el teatro de nuestros sudores, el lienzo donde Una a Una dibujó una ruta exigente y larga que nos tuvo rodando durante horas al filo de los 1000 metros de altitud.

Grupo de lujo el que hoy congregó Una a Una
Grupo de lujo el que hoy congregó Una a Una

Ruta circular en Tineo: Tuña  – Llamas del Mouro – los Cadavales – Tuña, (29/6/2014).

Longitud: 39 km  /  Tiempo: 4:30 horas (con paradas)  /  Desnivel positivo acumulado: 1150 m.

Ruter@s: Rosa, Puri, Mariajo, Manuela, Laura, Noelia, Marina, Luz, Olaya, Natalia, Lorena, Paula, Irene, Juan, Javi, Juaco, Rubén, Ángel, Jony, Jorge y Félix.

En el collado de los Cadavales
En el collado de los Cadavales

 

Damos la primera pedalada del día en Tuña (Tineo) a las 10 de la mañana temerosas de los extremos climatológicos: malo si las nubes se cierran y les da por descargar agua, malo si se abren del todo y nos dejan expuestas al martillo implacable del sol.

Comenzamos con calma la primera y hoy única subida del día: una larguísima ascensión de casi 20 kilómetros que debe llevarnos a los altos de la serranía de la Cabra, a veces nombrada como de los Cadavales.

La primera parte de la subida no tiene exigencia técnica (aunque sí física) ni cambios bruscos de pendiente, pero esconde la típica trampa de los puertos largos: o se acierta con el ritmo y los desarrollos o se pagarán los errores cometidos con interminables minutos de agonía en la zona alta de la ascensión. Con buen ánimo, a veces sobre hormigón, a veces sobre asfalto, vamos haciendo camino en dirección NorOeste a la sombra de castaños y robles hasta llegar a Llamas del Mouro, patria de la milenaria cerámica que da fama a la comarca.

La segunda mitad de la subida es más anárquica obligándonos a rodar por terrenos cambiantes: desde pistas francas hasta pedreros y praderías. Se alternan tramos de descanso con muros que nos tientan a bajarnos de la bici. Superado Parrondu encaramos los últimos kilómetros de la ascensión, los más duros y que nos sitúan por encima de los 1000 metros de altitud.

Lorena, Manuela y Juan entrando en Llamas del Mouro
Lorena, Manuela y Juan entrando en Llamas del Mouro

Después de casi tres horas pedaleando hacia arriba coronamos el collado de los Cadavales, punto más elevado de la ruta. El GPS marca 19 kilómetros y 1300 metros de altura, y no estalla en pedazos porque afortunadamente no sabe medir el ácido láctico acumulado en nuestras piernas. Nos hemos ganado las vistas que nos ofrecen los valles de los ríos Somiedo (al Este, sembrado de brañas) y Narcea (al Oeste, más poblado). Ahora impera el optimismo: tras el muy merecido repostaje en BP (Bocadillo y Plátano) tocará bajar, bajar y bajar.

El fotógrafo fotografiado
El fotógrafo fotografiado

El larguísimo descenso, aquí y allá adornado con alguna trialera, con curvas de 180 grados, con graveras trepidantes, nos ofrece hermosas estampas de los bosques que rodean La Azorera y Genestaza. Vadeamos algún río, culebreamos por alguna turbera y dejamos correr las bicis con alegría por pistas forestales antes de reencontrarnos con el asfalto. Cerca de una docena más de kilómetros de bajada, en ocasiones ciertamente pendientes, nos devuelven exhaustas pero encantadas a Tuña.

Fue un placer rodar hoy con amigos de Tous pa Tous y de Ciclando Asturias, y dar la bienvenida a Marina, que además de causarnos una gratísima impresión, va en bici como los ángeles. Rematamos otro divertido domingo en Una a Una con una comida en Tuña llena de buen humor y compañerismo.

Pedaladas Solidarias Trans-Atlas 2014

Cartel_Atlas imagen calidad

Además de las lógicas ambiciones puramente deportivas, el club tiene desde su misma creación un fuerte arraigo humanitario y benéfico. A tal fin hemos puesto en marcha ya varios proyectos que circunscribimos en dos categorías: “Pedaladas Solidarias” y “Escaladas Solidarias”.

El Camino de Santiago en bicicleta; la travesía ciclista Lhasa-Kathmandú en el Tíbet; la escalada a los volcanes Pichincha, Cotopaxi y Chimborazo en Ecuador; la combinada bicicleta-escalada desde Gijón hasta la cumbre de Peña Ubiña… son algunos de los desafíos que Una a Una ha llevado a cabo recaudando fondos para la lucha contra el cáncer, para la ayuda al deporte de discapacitados o para los comedores infantiles de Mensajeros por la Paz.

La fórmula que solemos emplear para canalizar la aportación económica de empresas, organismos o particulares es la de “comprar” simbólicamente los metros escalados o los kilómetros pedaleados.    Una a Una planea para principios de septiembre de 2014 un nuevo desafío: cruzar en BTT de Oeste a Este lacordillera del Atlas en Marruecos. Serán más de 400 kilómetros y seis días de marcha rodando por los inhóspitos parajes que recorre anualmente la carrera ciclista Titán-Desert, en los que contaremos con la cobertura mediática de la televisión, radios y los medios de comunicación impresos de Asturias.

Alrededor de una veintena de ciclistas participarán en el reto y los fondos que se recauden serán íntegramente donados a la Asociación Española Contra el Cáncer (Junta Regional de Asturias, de la que soy vocal). Cada deportista se costeará su viaje y estancia en Marruecos.

Sería un placer y un honor para Una a Una que su empresa decidiera colaborar con nosotras en este proyecto solidario “comprando” kilómetros de la travesía (hemos decidido establecer un precio de 1 euros por kilómetro). Calculamos que entre las aproximadamente 20 ciclistas que participaremos pondremos a la venta 10000 kilómetros.

Todas las aportaciones serán publicadas (si así lo desea el donante) en ésta página web. Recién iniciada la campaña la primera empresa en comprometerse con el proyecto ha sido cafés Toscaf. Pocos días después se han sumado Adarsa y Friobas. Igualmente hemos recibido el apoyo y compromiso de Chechu Rubiera, quien ha accedido a apadrinar esta iniciativa solidaria.

La donación se realiza mediante transferencia al número de cuenta de la AECC que es el siguiente:

 IBAN: ES06 0049 5233 2722 9320 8110 BANCO SANTANDER (concepto: kilómetros solidarios)

Para cualquier duda o sugerencia, estaremos a su disposición en el correo del club:  clubunaauna@hotmail.com

Cuenten de antemano con nuestra gratitud y con la absoluta garantía de transparencia para cada euro, cada céntimo, que este proyecto pueda aportar a la lucha contra el cáncer.

Pedaladas con historia en Llanes

Noelia eligió hoy para nosotras una ruta tan bonita y dura como emotiva al permitirnos visitar los entornos de enclaves prehistóricos como el ídolo de Peña Tú o la cueva de El Pindal y privilegios de la naturaleza asturiana como los bufones de Pría o la playa de Gulpiyuri.

Buen grupo (lo de abajo no es un bicho-bola, es Luz)
Buen grupo (lo de abajo no es un bicho-bola, es Luz)

Ruta circular en Llanes: Puertas de Vidiago – Sierra Plana – Bustio – Puertas de Vidiago, (22/6/2014).

Longitud: 45 km  /  Tiempo:  5:30 horas (con paradas)  /  Desnivel positivo acumulado: 900 m.

Ruter@s: Noelia, Puri, Mariajo, Maite, Luz, Manuela, Mariví, Juan, Juaco, Sabino y Rubén.

Mariví y Mariajo encabezando la marcha prado abajo
Mariví y Mariajo encabezando la marcha prado abajo

 

Salimos a las 11 de la mañana de Puertas de Vidiago con cielo despejado y ambiente cálido y con tremendo retraso por un imprevisto mecánico en la bici de Javi que al final le hizo abandonar la ruta. Hacemos un precalentamiento poderoso y subimos a ver el ídolo de Peña Tú, emblema de la comarca y joya patrimonial de Asturias. Tras una breve parada seguimos ascendiendo por un bosque, muy arbolado al principio y no tanto a medida que ganamos altura, camino de la Sierra Plana. Hasta llegar al alto de la Borbolla no baja la exigencia física de la ruta, pero ha merecido la pena: ahora disfrutamos de fabulosas vistas tanto de la rasa costera occidental como de la Sierra del Cuera.

Mariví bajando escoltada por Sabino
Mariví bajando escoltada por Sabino

Cresteamos media docena abundante de kilómetros por pistas de tierra despejadas y con algún rastro del agua caída estos días. Atravesamos praderías y turberas cada vez que la pista se difumina bajo nuestras ruedas dándole un punto de aventura incierta a la ruta. Las angulosas pero fiables calizas dominan el paisaje y nos ofrecen algún tramo técnico y vistoso antes de emprender el descenso de Sierra Plana. Nos espera una bajada por momentos radical que debe sacarnos del Valle Oscuro siguiendo el río Cabra y situarnos en Tresgrandas. En las inmediaciones de La Franca tomamos dirección Este y pasando al lado de Colombres llegamos casi a Bustio antes de girar hacia el Norte buscando el mar. Rodaremos durante un rato por el concejo de Ribadedeva.

Pues yo tenía otra idea sobre el ídolo de Peña Tú
Pues yo tenía otra idea sobre el ídolo de Peña Tú

Alcanzamos la costa y avanzando unos kilómetros por carretera nos desviamos hacia Pimiango. Llegamos a la ermita de San Emeterio y quedamos a un tiro de piedra de la cueva rupestre de El Pindal, que además de ofrecer una de las vistas más espectaculares sobre el Cantábrico guarda en su interior el célebre elefante rojo de 15000 años de antigüedad pintado por nuestros ancestros de las cavernas. Pena, penita, pena que debido al retraso que llevamos no nos podemos acercar a la cueva.

Tobogán va, tobogán viene, continuamos ruta hasta Pimiango ascendiendo el Pico Cañón, donde nos recrea la vista la panorámica increíble que se domina desde su mirador y pasamos por la playa de la Franca circulando en ocasiones por senderos no más anchos que un manillar. Siempre colgadas del Cantábrico superamos Buelna, Pendueles y Vidiago pasando al lado de los bufones de Pría (que a pesar de la pleamar no nos ofrecieron su espectáculo de vapor por el estado de calma del mar) para, cruzando la autovía, regresar a Puertas de Vidiago con un importante castigo en nuestras piernas y un impagable álbum de imágenes en la memoria. Espectacular y divertida ruta la que Noelia nos regaló hoy en los confines orientales del principado.

Hoy carrera en Curriellos (C. del Narcea)

Tras haber hecho ayer sábado una entretenida ruta a las órdenes de Juaco por los alrededores de Cangas del Narcea hoy el club ha participado en pleno en la prueba disputada en Curriellos sobre un duro trazado de algo más de 25 kilómetros con una numerosa inscripción masculina y femenina y buena presencia de público y aficionados.

Una a Una instantes antes de la salida
Una a Una instantes antes de la salida

Ruta circular en Cangas:  Curriellos – Carceda – Curriellos, (15/6/2014).

Longitud: 26 km  /  Tiempo: entre 2 y 4 horas  /  Desnivel positivo acumulado: 990 m.

Ruter@s: Puri, Rosa, Mariajo, Luz, Mariví, Elena, Charo, Paula, Lorena (Grado), Manuela, Juan, Juaco, Javi, Víctor, Felipe, Jorge, Ángel y Félix:

La parrilla de salida se va formando
La parrilla de salida se va formando

 

Salimos de Curriellos y en dirección SueEste nos enfrentamos de mano a una dura subida de 4 kilómetros que nos lleva a los 900 metros de altitud y nos deja las piernas al baño maría. La bajada que sigue hasta Robledo combina zonas técnicas con pistas que se prestan a desarrollar velocidades altas y peligrosas. Conviene guardar cierta distancia de seguridad con otros corredores para evitar sustos y disponer de tiempo de reacción.

Mariajo y Elena en uno de los escasos momentos de descanso
Mariajo y Elena en uno de los escasos momentos de descanso

Una dura rampa de un kilómetro da paso a un sector de toboganes que nos conduce a Rocabo donde nos espera una subida durísima por pistas muy expuestas y polvorientas. Combinando tramos asfaltados, graveras y pistas agrícolas afrontamos un largo descenso hasta Carceda en el que se hace imprescindible mantener un alto nivel de concentración. Aquí tienen una buena ventaja los que ya conocen la ruta pues pueden anticipar todos los giros y cruces.

Iniciamos el último tercio de la prueba subiendo por el reguero de los Molinos entre bosques cuya sombra es un alivio pero cuyos niveles de humedad pasan factura. Un descenso suave en su primera mitad y vertiginoso y técnico en la segunda nos lleva al inicio de la última subida del día. Son dos kilómetros no muy duros hasta Vallinas pero que terminan de devorar las pocas energías que nos van quedando.

El pódium de ganadores. Vaya cracks
El pódium de ganadores. Vaya cracks

Sólo queda descender hasta Curriellos y disfrutar de lo hecho. Es momento para mirar atrás y ver si alguien nos pisa los talones o adelante por si pudiéramos dar caza a algún desprevenido. En cualquier caso los maillots de Una a Una van llegando a meta entre los aplausos de las que ya completaron el recorrido y del público cangués que nos conoce y reconoce. Terminada la prueba una comida de fraternidad premia nuestros esfuerzos y pone punto final a un fin de semana lleno de risas, deporte y buena compañía.

Triunfo de Puri en la categoría femenina que hizo una carrera perfecta y sin errores, y primer puesto para Jorge (un Tous Pa Tous cuasiadoptado por Una a Una) en la categoría masculina exhibiendo poderío físico y técnico. Felicitamos y damos las gracias a la gente maravillosa de Curriellos que nos trataron de fantasía y nos hicieron sentir como en casa.

Gijón y la peña de los Cuatro Jueces

Hoy hemos hecho un crucero a pedales por Gijón; una ruta larga y divertida con extensos tramos de alta dificultad y multitud de lances genuinamente beteteros.

En la Peña de los Cuatro Jueces. ¡Vaya peña!
En la Peña de los Cuatro Jueces. ¡Vaya peña!

Ruta circular en Gijón: Gijón – peña de los Cuatro Jueces – Gijón, (8/6/2014).

Longitud: 43 km  /  Tiempo: 4:30 horas  /  Desnivel positivo acumulado: 940 m.

Ruter@s: Manuela, Rosa, Puri, Natalia, Charo, Mariajo, Lorena, Noelia, Maite, Juan, Juaco, Javi, Rubén, Jhonatan y Félix.

Noelia, Puri, Natalia y Lorena en uno de los escasos llanos del día
Noelia, Puri, Natalia y Lorena en uno de los escasos llanos del día

 

10 de la mañana en la playa de San Lorenzo; cielo incierto pero prometedor; temperatura fresca y aumentando; pelotón numeroso y motivado. Apurados los cafés Rosa anuncia solemnemente que no piensa abdicar, así que en cuanto se ajusta los automáticos la imitamos y arrancamos tras ella. Galones de sargento para Manuela que dirige la ruta y grita “avante toda” en dirección SurEste. Desde la cota 0 subiremos al punto más alto del concejo gijonés.

Todas tras Rosa bajando de la Campa
Todas tras Rosa bajando de la Campa

Por el parque del Piles vamos saliendo de Gijón en dirección a la parroquia de Deva. Allí empiezan las dificultades montañosas del día. Subimos al alto de la Olla combinando pistas forestales con algún tramo asfaltado. Vamos gestionando pendientes duras en general con rampas extremas y tramos técnicos con cantos rodados de gran tamaño que nos obligan a afinar la trazada.

En el cruce de caminos hacia el observatorio de Deva tomamos la variante descendente y nos dirigimos a Caldones por carretera. Pasamos por Rioseco circulando a la sombra de los más hermosos bosques de robles del concejo gijonés y pronto nos enfrentamos a nuevas pistas forestales con porcentajes durísimos que nos deben llevar al alto del Conde de Revillagijedo (o monte de Llagón). Cuando la subida parece que va a terminar, hay otra, y cuando ésta quiere acabar, otra, y otra.

Lorena, meteórica progresión la de la moscona
Lorena, meteórica progresión la de la moscona

Llegamos al fin a la peña de los Cuatro Jueces, vértice donde coinciden los concejos de Villaviciosa, Sariego, Siero y Gijón. Dice la leyenda que aquí se reunían cada primavera los mandatarios de estas pedanías para tratar asuntos de lindes, comerciales o de disputas entre vecinos. Estamos 660 metros más altos que hace tres horas, cuando dimos la primera pedalada del día y llevamos poco más de 20 kilómetros rodados, media ruta. Pero no hemos terminado de subir.

Ahora nos desafía desde la distancia el alto de la Campa, con su poblado penacho de antenas y sus graveras de acceso de pendientes extremas. Allá vamos, que no se diga que las Una a Una fueron retadas y miraron para otro lado. Estamos a casi 800 metros de altura y durante unos kilómetros transitaremos por Sariego y Siero. Toca, aleluya, bajar.

Las pistas de descenso hacia Baldornón son una delicia: rápidas, por momentos técnicas y con el valor añadido de hacernos pasar por parajes muy hermosos que de cuando en cuando ofrecen vistas impresionantes sobre la bahía de Gijón. Terminado el descenso sin percances solo nos quedan media docena de kilómetros con sabor a triunfo que nos devuelven a la villa gijonesa. En la playa disfrutamos de un merecido bocadillo con cerveza y entre bocado y sorbo aplaudimos a Manuela por habernos planeado una ruta que viene en el diccionario de la RAE tras el epígrafe “perfecta”.

Nora, Nalón y Trubia: todos los ríos de Oviedo

Hoy hemos hecho una ruta suave acompañadas de unos amigos del gimnasio Atlas en la que hemos ido visitando los tres ríos principales que corren por el concejo de Oviedo. Terrenos variados con subidas y bajadas tranquilas nos dejaron disfrutar de bonitos paisajes y de una mañana casi veraniega.

En San Pedro de Nora
En San Pedro de Nora

Ruta circular en Oviedo: Oviedo – El Escamplero – Trubia – Oviedo, (1/6/2014).

Longitud: 35 km  /  Tiempo:  3:30 horas  /  Desnivel positivo acumulado: 500 m.

Ruter@s: Lorena (Grado), Conchi, Mariajo, Manuela, Mariví, Natalia, Puri, Ana, Rosa, Juan, Juaco, Rubén, Sabino, Javi, Toño y Ricardo.

Conchi: potencia y buen humor a partes iguales
Conchi: potencia y buen humor a partes iguales

 

Salimos a las 9:45 de la mañana en el gimnasio Atlas y nos dirigimos a la Florida por donde abandonamos la capital para tomar el Camino de Santiago. Extremando las precauciones con los peregrinos de toda condición, edad y nacionalidad que vamos alcanzando, llegamos a puente Gallegos por pistas entretenidas de tierra y grava.

Mariví en pleno esfuerzo
Mariví en pleno esfuerzo

En Gallegos tomamos la Senda del Nora que debe izarnos en unos tres kilómetros al alto del Escamplero. Hay alguna rampa severa al principio que nos da alegría a las piernas y nos deja calorcito en los músculos. Luego se vuelve más tendida y nos deja disfrutar de buenas vistas sobre Oviedo y la sierra del Naranco.

Juan de la jungla
Juan de la jungla

La bajada camino del río Nora tiene también algunas pendientes notables que nos permiten disfrutar de la bici y de repente chocamos con la naturaleza asturiana en su esplendor máximo. El paso hacia San Pedro de Nora está prácticamente sellado por zarzas, ortigas y demás flora hostil. Malamente nos vamos abriendo camino y al llegar a la iglesia prerrománica de San Pedro de Nora comentamos la epopeya y nos premiamos con una merecida foto.

Saludamos y despedimos al río Nora y nos dirigimos a Trubia acompañando al Nalón. Un visto y no visto al río Trubia y tomamos la senda que entre valles de aluvión nos lleva a Las Caldas y luego a Fuso de la Reina. Aquí tomamos la Senda Verde y entre paseantes, ciclistas, patinadores y corredores vamos acercándonos a Oviedo y dando por concluida otra bonita ruta en la que por fin, y sin esperar al 40 de mayo, nos hemos quitado el sayo. 

Por caminos milenarios en Lena

Con Laura conduciendo el pelotón de Una a Una hoy hemos hecho una ruta de calidad con llegada y salida en Pola de Lena y con un perfil de dromedario: una única pero interminable subida de casi 12 kilómetros de longitud.

En el hayedo de Carraceo
En el hayedo de Carraceo

Ruta circular en Lena y Aller: P. de Lena – Carabanzo – Columbiello – P. de Lena, (25/5/2014).

Longitud: 30 km  /  Tiempo: 4:30 horas (con paradas)  /  Desnivel positivo acumulado: 1056 m.

Ruter@s: Laura, Charo, Noelia, Puri, Luz, Natalia, Maite, Manuela, Mariajo, Mariví, Juan, Juaco, Rubén, Manuel, Jony, Félix y una buena representación de los chicos de Ciclando Asturias.

Pelotón en la vía romana de La Carisa
Pelotón en la vía romana de La Carisa

 

A las 10 de la mañana la torre de control de Pola de Lena nos da permiso para despegar. Comandante: Laura; oficial de navegación: Jony; pasaje: numeroso y motivado; pronóstico meteorológico: más bueno que malo en el cielo, más mojado que seco en el suelo.

Charo y Maite bajando escoltadas por Manuel
Charo y Maite bajando escoltadas por Manuel

Cruzamos la Autovía de la Plata y, rumbo Norte, nos dirigimos llaneando hacia San Feliz. A los 5 kilómetros empezamos a describir un arco amplio hacia el NorEste y a ganar altura. En Carabanzo giramos bruscamente hacia el Sur y tomamos la vía romana de La Carisa. Esta ruta, mandada construir por Publio Carisio hace más de 2000 años, fue hasta la Edad Media el principal vector de comunicación entre la meseta y la cornisa cantábrica.

Cresteando por el cordal de Carraceo, separación entre los concejos de Lena y Aller, disfrutamos de buenas vistas sobre el valle de Bo en los ratitos en que se abre la nube en la que estamos inmersas y de la emocionante sensación de pisar con nuestras BTTs por donde lo hicieran en el pasado las legiones de Roma. A izquierda y derecha dejamos picos de entre 1500 y 2000 metros como el Homón, el Pedro García o el Cochapiuyu; a lo lejos, hacia el Sur, vemos el Tres Concejos y el Estorbín. Los bosques de hayas entre brumas son un espectáculo grandioso. Nos perdemos paisajes de larga distancia como la Ubiñas que desde aquí tendrían que mostrar su grandeza, pero a cambio ganamos esa sensación de que el universo se reduce a una esfera de cincuenta metros de radio, de que en la próxima curva va a aparecer algo que no esperabas.

Puri y Laura trazando una horquilla
Puri y Laura trazando una horquilla

La pendiente es más o menos constante durante toda la subida, sin rampas inasumibles pero con zonas técnicas que reclaman más de un golpe de riñón. Alrededor del kilómetro 17, al fin, coronamos el alto de Espines. Describimos un lazo en la cabecera del barranco de Peridiello y regalamos en apenas 5 kilómetros de divertida bajada toda la altura conseguida en más de dos horas de lucha, de sacrificio… de sarna con gusto.

Nos despedimos de la milenaria vía romana y apuntamos nuestros manillares hacia Columbiello al que llegamos tras media docena abundante de kilómetros llanos y sinuosos. El aterrizaje en Pola de Lena es suave y sin contratiempos. Solo queda felicitar a la comandante: otro éxito de ruta la que hoy planeó Laura para Una a Una. Como siempre, un placer rodar con los chicos de Ciclando Asturias.

A la cascada de Guanga desde Grado

Ruta de buen kilometraje la que hoy hemos hecho en Grado dirigidas por Elena y que nos ha permitido reencontrarnos y dar la bienvenida a Rosa, recién llegada del Himalaya tras conquistar la cumbre del Tserco Ri, a 5030 metros de altura, acompañada de Puri y Noelia.

Una a Una en la cascada de Guanga
Una a Una en la cascada de Guanga

Ruta circular en Grado y Oviedo: Grado – cascada de Guanga – Grado, (18/5/2014).

Longitud: 44 km  /  Tiempo: 5:15 horas  /  Desnivel positivo acumulado: 946 m.

Ruter@s: Elena, Olaya, Lorena (Grado), Irene, Manuela, Rosa, Conchi, Mariajo, Charo, Maite, Juan, Javi, Juaco, Rubén y Víctor.

 

Elena saliendo de la jungla
Elena saliendo de la jungla

10 de la mañana en la villa moscona, tiempo despejado, un pelotón numeroso y animado se pone en marcha con ganas de devorar kilómetros. Rodamos en dirección SurEste por carreteras secundarias y apenas dejamos atrás Grado ya estamos subiendo hacia la cresta Norte de la sierra de Tameza. Tomamos un desvío hacia Vega Peridiello, coronamos en La Garba y durante cinco kilómetros un terreno más o menos llano nos deja en Somines dispuestas a empezar un descenso fuerte pero corto hasta Borondes.

Sin transición, y metidas de lleno en un paisaje muy boscoso, iniciamos la violenta subida a la sierra que separa los cauces de los ríos Bascones y Trubia. Son unos cuatro kilómetros exigentes que van describiendo requiebros manteniendo el Este como dirección predominante. Súbitamente abandonamos el asfalto, tomamos rumbo Sur e iniciamos un descenso trialero fuerte y divertido que nos lleva al pueblo de Las Cruces.

Mariajo luciendo técnica en la bajada
Mariajo luciendo técnica en la bajada

De nuevo es acabar de bajar y ponerse a rebuscar desarrollos para la siguiente subida, no muy larga pero fatigosa, que nos debe llevar hasta Perlavia donde apreciamos las bonitas vistas sobre el valle del Trubia. Permanentemente miles de grillos golpean sus alas a nuestro paso poniendo su banda sonora a la ruta. Nos hace gracia pensar que están aplaudiendo nuestros esfuerzos.

Ahora nos espera una hermosa bajada entre bosques que nos lleva a la cascada de Guanga donde tomamos un bocado y nos permitimos un descanso. Este precioso y desconocido rincón en el límite SurOeste del concejo de Oviedo es el inicio de la segunda parte de la ruta, más relajada y corta que la primera, pero en la que se acusan los excesos de aquélla y el creciente calor de la mañana.

Bajamos a San Andrés, tomamos la Senda del Oso hasta Trubia y manteniendo rumbo Norte seguimos hasta Priañes. Aquí giramos hacia el Oeste y pegadas a los meandros del Nora lo vemos tributar aguas al Nalón y acompañamos a éste hacia Fozantes, Llera, Santa María y Vega de Anzo. El viejo puente de Peñaflor nos avisa del inminente final de esta entretenida ruta. Comoquiera que no están las piernas para sprints entramos en Grado en armonía dispuestas a buscar una sombra donde brindar por nuestra anfitriona Elena que, además, nos tenía preparada una suculenta empanada. Gran domingo.

Todos los terrenos en Tiñana

Equidistante de Castropol y de Bustio, de Cabo Peñas y de Pajares, Tiñana es el centro geométrico de Asturias y un lugar muy querido por Una a Una pues allí tenemos un consulado presidido por Mariajo.

Esta mesa, en la Paranza, debería llevar nuestro nombre
Esta mesa, en la Paranza, debería llevar nuestro nombre

Ruta circular en Siero y Oviedo: Tiñana – la Paranza – la Faya – Tiñana, (11/5/2014).

Longitud: 23 km  /  Tiempo:  3:45 horas  /  Desnivel positivo acumulado: 845 m.

Ruter@s: Mariajo, Conchi, Olaya, Laura, Irene, Manuela, Maite, Natalia, Javi, Juan, Juaco, Rubén, Sabino y Félix.

 

Tiñana Paraíso Natural
Tiñana Paraíso Natural

Salimos a las 10 de la mañana de la iglesia de Santa María de Tiñana desconfiando tanto de los pronósticos meteorológicos oficiales como de las inciertas trazas que en directo nos muestra el cielo; unos de coulotte corto, otros de largo, unos con las patas peludas, otras con ellas peladas.

Manuela y Maite escoltadas por Juan
Manuela y Maite escoltadas por Juan

Apenas arrancamos ya le vemos la intención a Mariajo: subir, subir y al llegar arriba subir otro poco. La Cruz de los Campos, con pistas de fuerte desnivel, nos ve pasar camino del alto de la Paranza, un clásico de Una a Una a cuya subida, sostenida, larga, sembrada de rampas durísimas, no es sencillo acostumbrarse.

Olaya y Laura: ciclistas de 28 kilates
Olaya y Laura: ciclistas de 28 kilates

En la cima hacemos la parada del plátano y coincidimos con Isa y Dani, de Astur Colloto BTT. Emprendemos la bajada por el Camino de Covadonga topándonos con un terreno muy divertido: graveras, barrizales casi inabordables y trialeras técnicas con buenos escalones empedrados.

Natalia  coronando la Paranza
Natalia coronando la Paranza

Rápidamente nos vemos en Friedes y por carretera llegamos a Veguín donde nos espera el último tormento del día: la subida a la Faya. Rampas y más rampas hormigonadas de porcentajes enloquecidos van minando nuestras fuerzas pero jamás nuestra moral. Culminada la hazaña el Camino de Covadonga nos acoge de nuevo con sus humedales y hermosos robledos para situarnos en la Senda del Jabalí por la que nos dejamos caer de nuevo hasta Tiñana.

Variopinta y divertida ruta (como siempre que Mariajo tiene el timón) la que hoy nos hemos echado a las piernas por los alrededores de la parroquia de los 999 habitantes y casi otros tantos llagares.